miércoles, 8 de julio de 2009

Va de nuevo

¿Dónde deposito el fuego
en este roto invierno?
¿Quién recibirá mis aguas,
quién atrapará silencios?

¿Dónde guardo el desasón
en esta lucha vana,
en este amor descalzo
de estas tibias ganas?

¿Cómo vuelvo confianza
en este par de pies?
¿Cómo infundo el valor
o burlo la vejez?

¿Dónde esconden la esperanza
enmohecidas sombras?
¿Cómo es que se destruye
promesa que nombran?

¿A quién puedo pedir cuentas
de ocasión tirada?
¿Quién es el enemigo,
quién huye esta mirada?

¿Dónde quedará la vida,
tanta risa hecha lamento?
¡Despierten ya señores,
hagamos otro intento!

2 comentarios:

  1. cuando escribes, piensas en que tiene que quedar en cuatro renglones en cuatro párrafos?

    ResponderEliminar
  2. mhm... por lo general el primer verso marca la pauta. No tengo claro cuándo terminará. Es como si el poema decidiera por sí mismo cuándo terminar. En ese momento siento que continuar sería "forzarlo". Además los escribo en un cuadernito, hasta que llego a casa y lo subo al blog me doy cuenta de su extensión :)

    ResponderEliminar